Esta mujer es quizá la más reconocida por todos, mínimo nos alegramos cuando vemos su cara, hablo de Policarpa Salavarrieta, más conocida como la señora del billete del 10 mil. Otro de su seudónimo “La Pola” nos recuerda a la cerveza, pero hoy recordaremos a la mujer que le dio nombre a esta bebida, respondiendo a unas simples preguntas ¿Quién era? ¿Qué hacía? ¿Cómo termino involucrada? ¿Le gustaban los hombres con patillas bolivarianas? Esto al final de la transmisión.
Lo más seguro y sin falla es que nació en el año 1793, o 94, o 95, o 96, bueno la idea es esa. Pero lo más seguro es que nació en Guaduas, o en Santa Fe, o en Mariquita, bueno al menos sabemos que se llamaba Policarpa, o Polonia, o Gregoria Apolinaria.
De hecho no sabemos un rábano de ella, solo de sus hermanos, sus padres, murieron con una epidemia de Viruela, solo ella y algunos de sus hermanos sobrevivieron para contarlo. Aunque antes de que esto ocurriera vivió en una familia, que bien no era la cosa más millonaria, ella no se podía quejar, bueno hasta que llego la viruela, ahí sí tuvo mucho de lo cual quejarse. Su hermana mayor Catarina (que nombre más feo) se la llevo a Guaduas con su hermano Bibiano (ammm, bueno es mejor que Catarina, creo…) y se establecen en la casa de Margarita Beltrán (interesante apellido creo que lo vi por este blog, quizá sea hermana o algo), donde aparentemente trabajo como costurera, y se contagia del espíritu libertario de su nuevo cuñado Domingo García, quién se encuentra con el señor buena suerte Don Toño Nariño y muere en las campañas del sur, y a quien su hermano acompaña y regresa herido de tales campañas.
A sus 14 añitos esta sardina* ya estaba revoloteando por ahí, participando en el grito de independencia del 20 de julio de 1810, vinculándose al ejercito patriota de los llanos, haciendo de mensajera, comprando armas, convenciendo pelaos** en las calles a que se unieran a la causa (algo así como una testigo de Jehová pero independentista), y su labor más importante, era una espía (agente 0010 Lucas***).
Su compañero más importante Alejo Sabarain la apoyo con las labores de espionaje una vez regreso del indulto por haber sido capturado en la campaña del Sur con don Toño (otro a quien se le contagia la buena suerte). Muchas de estas actividades hubieran sido exitosas de no ser porque los hermanos Almeyda fueron capturados y con ellos las pruebas contra la Pola.
Quién la captura es el Sargento Iglesias, en la casa de Andrea Ricaurte de Lozano y la encierra en el Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario (si el mismo de don Milo Torres, ese que cerraron y se volvió cárcel por ir en contra del Virrey)
Es condenada a ser ejecutada a las 9 am (bueno al menos no la hicieron madrugar) junto con Alejo y otros condenados, donde pasa sus últimos momentos llenándose de ira, maldiciendo a los españoles, sube al banquillo y pronuncia su frase más celebre “viles soldados, volved las armas a los enemigos de vuestra patria. ¡Pueblo indolente! ¡Cuán distinta sería hoy vuestra suerte si conocieseis el precio de la libertad! Pero no es tarde. Ved que, aunque mujer y joven, me sobra valor para sufrir la muerte y mil muertes más, no olvidéis este ejemplo”, se le ordena que se ponga de espaldas para morir como todos los traidores, pero pide morir de rodillas ya que era una posición más digna para una mujer (aunque no veo lo digno de matar a esta mujer).
Esto fue lo último que sabemos de esta mujer, fusilada por creer en sus convicciones, creer en la libertad y en la fortaleza, quizá sea la más recordada por eso, a tan corta edad, tenía todo el valor de un pueblo en su cuerpo, y aunque asesinada a los ojos de aquellos a quienes quería proteger, tuvo la valentía de invitarlos a luchar por sus derechos contra la tiranía, último acto que llenaría de fuerza a muchos y sería una inspiración en aquellos días, y hoy también.
*Sardina/o en Colombia se le dice a los jóvenes, frase muy común de región Cundiboyacense
**Pelaas/os también es un término utilizado para los jóvenes, determinado por la edad en que no les crece bello corporal
***Lucas es un término que se utiliza para el dinero, su equivalencia de 1 luca es a 1000 pesos Colombianos
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